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Portfolio
Sample translations submitted: 2
English to Spanish: Paperless tickets – a solution to ticket touts? General field: Art/Literary Detailed field: Music
Source text - English English (original):
Paperless tickets – a solution to ticket touts?
Music fans have been plagued by ticket touting, and now they’re being hit with inflated prices on ticket reselling sites. So are paperless tickets, which come with many restrictions, the answer?
Event tickets are often seen as a murky world. You used to just see a few guys standing outside concerts trying to sell you tickets at inflated prices. Then it was the likes of eBay selling sold-out tickets from other fans who were unable to attend.
It wasn’t long before this whole operation turned professional with international websites such as Viagogo and Seatwave muscling in on the act.
Tickets now seem to sell out incredibly quickly, only to immediately appear on secondary sites such as Viagogo for inflated prices. But although the prices seem very high, surely it’s just supply and demand? And surely you’re just buying from another fan who has a couple of spare tickets for sale? Maybe not.
Back in February, Channel 4 dropped a number of bombshells on ticket reselling. Firstly, it was claimed that some concert promoters were secretly allocating tickets directly to these ‘resale’ sites and pocketing the profits. Secondly, it was even claimed that staff from some of these sites, including Viagogo, were buying tickets and selling them at inflated prices. Finally, professional resellers were said to be using software to buy huge numbers of tickets to resell.
A step too far?
Some acts in the music industry have taken it upon themselves to clean up this problem. I wrote recently about Radiohead’s efforts: fans who bought tickets from the official fan club had the option to resell unwanted tickets, only at face value, through a special website. It seemed a great solution for those lucky enough to get fan club tickets.
However, the rest of the tickets were sold on Ticketmaster as paperless tickets – a hugely restrictive type of ticket that intends to prevent ticket reselling, but often at the expense of genuine fans.
Paperless tickets can only be collected at the venue by the credit card holder who purchased the tickets. They must also present ID upon entry, and they personally must attend the gig. So you couldn’t buy the tickets as a gift, or give them to a friend if you were unable to go. With paperless tickets, Ticketmaster is the exclusive ticket seller which means you couldn’t even shop around if you wanted to.
Many Radiohead fans have expressed their frustration at the restrictions. For example, the doctor Richa Manwani told the Guardian:
‘I have found out that I am on call that day and am unable to make the event. Only I can redeem the tickets on the night of the event with my credit card and photo ID. This means I have no way of selling them on for face value. Ticketmaster offers a no-refunds policy, which means I have lost my money.’
It might sound a bit restrictive and unfair, but on the other hand, professional ticket touting feels unfair too. So where do we go from here?
Are paperless tickets too restrictive, or are they justified given the threat of ticket touting? Do you think there’s another solution?
Translation - Spanish Spanish (translation):
Tickets electrónicos - ¿Una solución para la reventa de tickets?
Los fanes de la música han sido plagados por la reventa de tickets, y ahora están siendo golpeados por precios inflados en los sitios de reventa de tickets. Así que, ¿los tickets electrónicos, que vienen con muchas restricciones, son la respuesta?
Los tickets de eventos se ven muchas veces como un mundo turbio. Uno solía ver unos cuantos tipos parados afuera de los conciertos tratando de venderte los tickets a precios más altos. Luego era gente desde eBay vendiendo tickets agotados de otros fanes que no pudieron atender.
No tardó mucho para que a operación completada se convirtiera en algo profesional con sitios internacionales como Viagogo y Seatwave.
Parece que ahora los tickets se venden increiblemente rápido, sólo para aparecer inmediatamente en sitios secundarios como Viagogo a precios inflados. Pero aunque los precios se vean tan altos, ¿seguramente se trata de la oferta y la demanda? ¿Y seguramente sólo estás comprando un ticket de otro fan que tiene un par te tickets extra? Tal vez no.
En Febrero, Channel 4 lanzó un número de bombas acerca de la reventa de tickets. Primero, se afirmó que algunos promotores de conciertos estaban alocando los tickets secretamente directamente a estos sitios de “reventa” y tomando las ganancias. Segundo, incluso fue afirmado que miembros de estos sitios, incluyendo Viagogo, estaban comprando tickets y vendiéndolos a precios inflados. Finalmente, los revendedores profesionales habían declarado estar utilizando software para comprar grandes números de tickets para revender.
¿Un paso muy grande?
Algunos actos en la industria musical han tomado la responsabilidad de resolver éste problema. Escribí recientemente acerca de los esfuerzos de Radiohead: los fanes que compraron tickets del sitio de club de fanes oficial tenían la opción de revender los tickets que no necesitaban, sólo al valor nominal, a través de un sitio web especial. Parecía una gran solución a las personas que tenían la suerte de conseguir tickets del club de fanes.
Sin embargo, el resto de los tickets fueron vendidos en ticketmaster como tickets electrónicos – un tipo de ticket altamente restrictivo con la intención de eliminar la reventa de tickets, pero la mayoría de las veces a costa de los fanes genuinos.
Los tickets electrónicos sólo pueden ser conseguidos en el lugar del show con el propietario de la tarjeta de crédito con la que se compraron los tickets. También deben presentar identificación al entrar, y deben atender al show personalmente. Así que no podrías comprar los tickets como un regalo, o dárselos a un amigo si no puedes ir. Con los tickets electrónicos, Ticketmaster es el vendedor exclusivo, lo que significa que no podrías comprar alrededor incluso si quisieras.
Muchos fanes de Radiohead han expresado su frustración hacia estas restricciones. Por ejemplo, la Doctora Richa Manwani le dijo a The Guardian:
“Me dí cuenta de que tengo turno ese día y no voy a poder ir al evento. Sólo puedo recoger los tickets el día del evento con mi tarjeta de crédito y mi identificación por foto. Esto significa que no tengo forma de venderlos al valor evidente. Ticketmaster tiene una política sin reembolsos, lo que significa que he perdido mi dinero.”
Tal vez suene un poco restricitivo e injusto, pero del otro lado, la reventa profesional de tickets suena injusto también. Así que, ¿A dónde vamos desde acá?
¿Los tickets electrónicos son muy restrictivos, o son justificables dada la amenaza de la reventa de tickets? ¿Piensas que hay otra solución?
English to Spanish: Dissecting the Digital Dollar: Part One. Executive Summary General field: Art/Literary Detailed field: Music
Source text - English https://themmf.net/site/wp-content/uploads/2015/09/digitaldollar_execsummary.pdf
Translation - Spanish Analizando el dólar digital
Parte uno
Cómo los servicios de streaming son licenciados y los desafíos que los artistas enfrentan hoy
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Sección uno: Resumen ejecutivo
El crecimiento de lo digital ha creado desafíos y oportunidades para la industria de la música. Los desafíos alrededor de la piratería han sido documentados extensamente, pero trabajar con servicios digitales legítimos también ha sido desafiante para los propietarios de los derechos de las pistas, especialmente ya que hemos visto un cambio de descargas a transmisiones, porque licenciar estas plataformas requiere una nueva técnica para hacer negocios.
Durante la última década el sector de los derechos musicales ha estado ocupado evolucionando sus nuevos modelos de licencia, y los nuevos estándares de la industria están surgiendo. Sin embargo, los problemas permanecen, y todavía hay debates acerca de si los fundamentos y detalles de estos nuevos modelos de negocio son las mejores soluciones, y si han sido creados para ser más beneficiosos para las partes interesadas en la comunidad de la música que a otras.
E incluso en donde los estándares están apareciendo, aún existe mucha confusión en la comunidad musical en general sobre como exactamente los servicios de streaming están siendo licenciados, como se calcula cuales servicios digitales deben pagar, y cuánto dinero se procesa y se comparte entre la industria de los derechos de la música.
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Aquí están las razones para esta confusión
• La naturaleza complicada de los acuerdo de streaming
• La industria discográfica y publicadores de música no siempre licencian de la misma manera
• La forma en que los servicios se licencias y las regalías se procesan puede variar de país en país
• La mayoría de los tratos de streaming son en el fondo arreglos de compartimiento de ingresos, haciendo pagos exactos por uso menos predecibles.
• Los detalles de varios tratos de streaming son secretos gracias a acuerdos de confidencialidad en contratos claves
• Aquellos que han estado en el tope del desarrollo de nuevos arreglos de licencia han hecho un mal trabajo en comunicarlos a otras partes interesadas.
Para mejorar estos nuevos modelos de licencia, las compañías discográficas, editores musicales y organizaciones de administración colectivas han tenido que navegar en las leyes de derechos de autor y otras convenciones de la industria musical las cuales no fueron específicamente desarrolladas con la distribución digital de contenido grabado en mente.
Al hacer esto, algunas suposiciones han sido hechas con las cuales tal vez, pensando en lo que podría suceder, requieran más consideración, ya sea por los creadores de leyes, cortes o la comunidad musical en general. O, por lo menos, un alcance más unificado a través de la industria, y a través del mundo
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Analizando el dólar digital
Para poder informar este debate, el Foro de Managers de Música del Reino Unido encargó este reporte, para analizar y explicar cómo los derechos de la música han sido explotados en el pasado, como las licencias digitales han cambiado, y que problemas necesitan ser corregidos ahora. Hablamos profundamente a más de 30 practicantes a través de los sectores legales y digitales de la música, y encuestamos a 50 managers de artistas en cinco mercados quienes, entre ellos, representan artistas que han firmado a las tres principales compañías musicales y a más d 100 sellos independientes.
La manera en que los derechos musicales trabajan varía alrededor del mundo, en parte por las diferencias en las leyes de los derechos de autor, y en parte por las diferentes prácticas y convenciones que han evolucionado en cada mercado. Esta variación es un desafío en sí en un sector digital en donde tantos servicios aspiran a ser realmente globales.
También representan desafíos en explicar cómo los derechos musicales trabajan en un nivel general, por las diferentes reglas, tecnicidades y terminologías que puedan aplicarse en un país; y hay diferencias significantes de énfasis entre las jurisdicciones de “leyes comunes”, como el Reino Unido y los Estados Unidos, y sistemas de “leyes civiles”, como Francia y España.
Aunque hemos intentado ser “neutral” en el mercado tratando de describir los principios de los derechos de autor de la música en este reporte, podría decirse que hemos empezados desde una ley común y posiblemente con una perspectiva parecida al Reino Unido, pero intentaremos ser claros cuando las diferencias claves existan entre los diferentes sistemas.
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DERECHOS MUSICALES Y PLATAFORMAS DIGITALES: COMO FUNCIONAN
1. Los derechos de autor proveen a los creadores con controles que pueden ser explotados para conseguir ganancias
El copyright es a la larga para proveer a los creadores con ciertos controles sobre lo que pueden crear, ya sea como principio, y/o para alentar y permitir la creatividad al permitir a los creadores y sus socios explotar estos controles para hacer ganancias.
Los controles que un propietario de los derechos de autor tiene pueden variar de país a país, pero usualmente incluyen el derecho exclusivo para hacer y distribuir copias de un trabajo creativo, adaptar el trabajo, para rentarlo o comunicarlo, e interpretarlo en público.
Los derechos de autor hacen dinero cuando las terceras partes desean explotar uno de estos controles, porque las terceras partes necesitan conseguir permiso – o una licencia – del propietario de los derechos. El Licenciador usualmente le cobra una tarifa al concesionario para otorgar permiso.
2. El mercado musical principal
La industria musical controla y explota varios tipos de propiedades intelectuales, aunque el mercado principal de los derechos musicales son los derechos de autor separados en las canciones (letras y composición) y las grabaciones de sonido, lo que los sistemas de leyes civiles se referirán al ‘autor’ separado y ‘derechos conexos’.
La ley de derechos de autor y la industria musical tratan a estos dos tipos de derechos distintamente de manera habitual. Dentro del negocio, los editores de música generalmente controlan los derechos de autor mientras las compañías discográficas controlan los derechos de grabación.
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¿Cuáles derechos y controles estás explotando?
Cuando quemas una copia de una pista a un cd
Estás explotando el ‘control de reproducción’ de la canción y el derecho de grabación (lo que los editores de música llaman ‘el derecho mecánico’)
Cuando interpretas una canción en un concierto
Estás explotando el ‘control de actuación pública’ de sólo el derecho de la canción.
Cuando tocas una canción en la radio
Estás explotando el ‘control de comunicación’ de los derechos de la canción y la grabación.
Cuando sincronizas una pista a un programa de TV
Estás explotando el ‘control de reproducción’ de los derechos de la canción y la grabación cuando realmente sincronizas la pista… y luego el ‘control de comunicación’ de los derechos de la canción y la grabación cuando el programa de TV es emitido en vivo
Cuando descargas o transmites una pista
Estas explotando el ‘control de reproducción’ y el ‘control de comunicación’* (también probablemente el específico ‘control de disponibilidad’) de los derechos de la canción y la grabación.
*Esto puede variar de país a país, por ejemplo en los estados unidos solo se requiere una licencia de derechos de reproducción para las descargas, mientras que solo se requiere una licencia de derechos de actuación se requiere para servicios de radio personalizada.
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Esto es importante para cualquier persona que quiera licencia una grabación de una canción, porque significa que tendrán que hacer tratos separados con las compañías de grabación y los editores de música, y los ellos y editores tal vez tengan maneras diferentes de realizar el trato.
3. El proceso de licencia variará dependiendo en el uso
La manera en como los sellos y editores licencian a un concesionario dependerá muchas veces de los ‘controles’ antes mencionados que se quieran explotar.
Por ejemplo, si quieren explotar los controles de reproducción y distribución – los que pueden ser llamados ‘reproducción’ o ‘derechos mecánicos’ – pueden ser licenciados de una manera diferente si quieren explotar los controles de actuación o comunicación – los que pueden ser llamados ‘derechos de actuación’ o ‘derechos conexos’ (esto siendo un uso diferente del termino de ‘derechos conexos’)
A veces los propietarios de los derechos licencian ‘colectivamente’, en vez de los propietarios de los derechos individuales y concesionarios teniendo una relación directa. Cuando esto sucede todos los sellos o todos los editores designan a una “organización de administración colectiva” (OAC) para licenciar a su nombre. Esto puede ser hecho por razones prácticas, o porque las leyes de derechos de autor instigan una ‘licencia compulsoria’, lo cual significa que un propietario de derechos no puede denegar la licencia en ciertos escenarios, aunque los concesionarios aún son obligados a pagar regalías. La licencia colectiva es usualmente propensa a llevar regulaciones extras con una corte o un organismo público que al final tiene el poder de fijar las tarifas de regalías.
En general (hay muchas excepciones, por ejemplo en sincronización), los sellos comúnmente licencian los derechos de reproducciones directamente pero los derechos de actuación colectivamente, mientras que los editores muchas veces licencian los dos conjuntos de derechos a través de OACs, pero posiblemente diferentes OACs (en el Reino unido, MCPS y PRS respectivamente).
4. Es importante saber quién controla cada derecho de autor
Al contrario de otros tipos de propiedad intelectual, los derechos de autor no se registran usualmente con una autoridad legal, lo cual dificulta identificar a los propietarios.
La ley de derechos de autor define a los propietarios ‘predeterminados’ o ‘presuntos’ los propietarios de nuevos trabajos, aunque estas reglas pueden variar de país a país, y pueden ser diferentes para las canciones y grabaciones. Los propietarios predeterminados también pueden usualmente transferir la propiedad, o por lo menos el control, a otra parte – usualmente a cambio de dinero – a través de los llamados acuerdos de ‘asignación’ o ‘licencia’.
Como resultado, no importan lo que digan las reglas de propiedad predeterminada, la mayoría de las canciones son poseídas o por lo menos controladas por los editores de música, y la mayoría de las grabaciones son poseídas o por lo menos controladas por las compañías de grabación. Los cantautores, involucrados en crear canciones y grabaciones, usualmente tendrán acuerdos separados con compañías separadas cubriendo sus respectivos derechos de canciones y grabaciones.
Aunque hay una distinción muy importante cuando se trata de las canciones, como que un escritor pueda asignar a un OAC directamente para controlar algunos elementos de sus derechos de autor y un editor para controlas los otros elementos. Así que en el Reino Unido, un escritor puede asignar los derechos de actuación al PRS pero los otros derechos al editor. El editor entonces tiene el derecho por contrato de compartir los ingresos de derechos de actuación, pero no controla exactamente ese elemento de los derechos de autor.
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¿Quién controla los diferentes derechos musicales?
Un sello envío a los artistas al estudio a escribir y grabar nueva música
… una canción y una grabación se crean
DERECHOS DE AUTOR DE LA CANCIÓN DERECHOS DE AUTOR DE LA GRABACIÓN
¿Quién es dueño?
Por lo general, usualmente el escritor/es, aunque ellos usualmente transfieren la propiedad y/o control a otras partes. ¿Quién es dueño?
Por lo general, el propietario varía de acuerdo a la ley de derechos de autor – puede ser sello o artista – aunque el artista usualmente transfiere la propiedad y/o el control a otras partes.
¿Cuáles derechos?
Los derechos de auto tienen un número de ‘controles. El escritor comúnmente transfiere algunos controles a una ‘organización de administración colectiva’ y los otros controles a un editor. En el Reino unido: ‘derechos de actuación’ al OAC, otros derechos al editor. ¿Cuáles derechos?
Los derechos de auto tienen un número de ‘controles, todos cuales son usualmente transferidos al sello discográfico. Sin embargo, el derecho separado del artista para la ‘remuneración equitativa’ (RE) en ingresos de derechos de actuación no puede ser transferido usualmente al sello
DERECHOS DE ACTUACIÓN DE LOS DERECHOS DE AUTOR DE LA CANCIÓN OTROS ELEMENTOS DE LOS DERECHOS DE AUTOR DE LA CANCIÓN
OAC
(PRS en Reino Unido) EDITOR MUSICAL
El OAC se encarga de la licencia El Editor licencia directamente o a través de un OAC (MCPS en Reino Unido)
El CMO pasa 50% de los ingresos al editor y 50% al escritor El editor paga las regalías al escritor de la canción de acuerdo al contrato de edición
TODOS LOS ELEMENTOS DE LOS DERECHOS DE AUTOR DE LA CANCIÓN DERECHOS DE ‘RE’ DEL ARTISTA EN INGRESOS POR ACTUACIÓN
SELLO DISCOGRÁFICO OAC DEL ARTISTA (PPL en Reino Unido)
El sello licencia directamente o vía OAC (PPL en Reino Unido) OAC recauda el RE del intérprete
El sello paga regalías al artista creador de acuerdo al contrato de grabación El OAC pasa la RE al artista creador y al intérprete de la sesión
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Por último, los derechos de autor pueden ser compartidos. Esto es particularmente común con los derechos de autor de las canciones, porque la colaboración es común en su creación. Cuando hay copropietarios de una canción, un concesionario usualmente necesitará permiso de cada parte interesada para poder usar el trabajo.
5. Derechos de Creador e intérprete
Los artistas y compositores usualmente asignan los derechos de autor en sus grabaciones y canciones a los sellos discográficos y editores de música; esto es especialmente cierto con los nuevos talentos que necesitan que sus socios corporativos hagan inversiones arriesgadas en sus carreras en la forma de desarrollo artístico, contenido, producción marketing y anticipos en efectivo.
Pero los artistas y compositores todavía retienen algunos derechos en relación a las grabaciones y canciones a través de sus contratos de edición y grabación, particularmente el derecho de compartir cualquier ingreso generado por su trabajo, y tal vez los derechos de consultas, aprobación o veto.
A parte de estos derechos contractuales, los artistas y compositores también pueden disfrutar de otros derechos directamente de la ley de derechos de autor, comúnmente llamados derechos morales y derechos de actuación. Para los artistas que graban, los derechos de actuación más comunes se relacionan con ‘aprobaciones’ y ‘remuneración equitativa del intérprete’.
La aprobación usualmente debe ser ganada para grabar la actuación de un artista para luego explotar la grabación. Los artistas pueden muchas veces disfrutar de un derecho automático (por ejemplo, extracontractual e irrenunciable) para compartir en ciertas (pero no todas) ingresos asociados con sus grabaciones, más a menudo siendo los ingresos de derechos de actuación, los cuales coexisten con los derechos de autor que muy probablemente son controlados por una entidad corporativa.
6. Licencia Digital
En el dominio del producto físico, una compañía discográfica explotaba sus propios derechos de sonido y grabación, y licenciaba los derechos para explotar los derechos acompañantes para el editor de música relevante, usualmente a través de un sistema de licencia colectivo. El CD era luego proveído al vendedor con ‘los derechos listos’.
Con solo algunas excepciones, en el domino digital, las tiendas de descarga y servicios de streaming necesitan tener relaciones de licencia separadas con las compañías discográficas y editores de música y/o sus respectivos OACs. Los sellos generalmente licencian todo excepto la radio en línea directamente, aunque los servicios de radio personalizados pueden ser licenciados por el OAC en algunos territorios (especialmente los Estados Unidos, en donde una licencia compulsoria aplica). Los editores licencian la mayoría de los servicios digitales colectivamente, aunque los editores más grandes ahora a veces licencian el repertorio anglo-americano directamente, aunque a través de un proyecto conjunto a los OACs.
Como una complicación adicional, las descargas y los streams explotan los derechos de reproducción y de actuación de los derechos de autor.
En el lado de la edición, esto es importante porque estos dos elementos de los derechos son usualmente licenciados separadamente (se ha de recordar, en el Reino Unido el PRS controla los derechos de actuación y el editor el derecho de reproducción).
Fuera de los Estados Unidos, los editores usualmente trataran proveer servicios digitales con ‘licencias de derechos combinadas’, lo cual significa que, en donde los derechos de reproducción y actuación son controlados por entidades diferentes, estas dos entidades deben trabajar juntos. Por ejemplo, en donde los editores licencias directamente con digital, deben hacerlos con asociación con los OACs que controlan los derechos de actuación.
En el lado de las grabaciones, el sello es capaz de licenciar los dos elementos de los derechos de autor, aunque por convención la remuneración equitativa del intérprete era usualmente usada en ingresos por derechos de actuación pero no ingresos de derechos de reproducción, haciendo el hecho que los dos derechos son explotados sea relevante. Excepto, la mayoría de los sellos piensan que un derecho de actuación específico y separado, introducido por primera vez en la mitad de 1990 y llamado el “derecho de disponibilidad”, es lo que las plataformas digitales realmente están explotando, y que es eximido de la remuneración equitativa. No todos los artistas están de acuerdo.
7. Acuerdo de Streaming
La mayoría de los servicios de streaming son licenciados más o menos de la misma manera. El acuerdo entre el propietario de los derechos y la plataforma es más que todo un arreglo de ingresos.
Cada mes el servicio de streaming calcula cual porcentaje del consumo total vino del catálogo de un sello o editor. Luego asigna el porcentaje de sus ingresos por publicidad y/o suscripción totales (luego de los impuestos de venta) al propietario delos derechos, y les paga una parte basado en el arreglo antes asignado. Cada acuerdo es diferente, y usualmente secreto, aunque los sellos generalmente ven 55-60% de los ingresos asignados a sus catálogos mientras los editores ven 10-15%. En general, los servicios de streaming tratan de retener un 30%.
A parte del arreglo de ingresos principales, los propietarios de derechos usualmente buscan minimizar su riesgo haciendo que el servicio de streaming pague tarifas mínimas, por ejemplo por reproducción, para garantizar cierto ingreso basado en el consumo ignorando los ingresos del servicio. Los propietarios de derechos también usualmente demandan pagos anticipados de los servicios de streaming, mientras que los sellos buscan equidad en servicios startup y otras comisiones ilegales.
8. Flujo de Dinero
El pago de regalías de streaming puede ser complejo. Los servicios de streaming generalmente asumente que cualquier sello que lo proveyó con una pista es dueño de los derechos, y se le paga a ese sello su pate de los ingresos, o la garantía mínima, cual sea la más alta.
El sello luego usualmente se ve obligado a compartir ese ingreso con el artista, sujeto a los términos de dicho artista en el acuerdo de grabación. La mayoría de los sellos le pagan a los artistas la misma parte en digital que en físico, o tal vez un poco más. Ha habido mucho debate sobre si esto es justo, mientras unos artistas con contratos pre-digitales dicen que esta es una interpretación incorrecta de sus acuerdos originales.
Cada acuerdo de grabación es diferente, pero usualmente los artistas reciben una parte menor del ingreso – comúnmente 15-20% - y solo luego de que unos o todos los costos en curso del sello hayan sido pagados (términos exactos establecidos en el contrato de grabación). Hay confusión en la comunidad de los artistas y managers acerca de cuáles costos en curso los sellos están restando de los ingresos digitales.
En el lado de los editores, los servicios de streaming usualmente no saben cuál editor o editores es/son dueños de los derechos de cualquier canción. Por esto, el servicio de streaming reporta todo consumo a cada licenciante. El dueño de los derechos luego calcula cuanto se debe y factura al servicio, que luego necesita asegurarse que no está siendo facturado dos veces por la misma canción (o que dos licenciantes no están pretendiendo ser dueños de 60% de una canción).
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Luego de que el sector de edición ha sido pagado, el dinero necesita ser compartido entre los derechos de actuación y reproducción. Lo que sucede depende en el país. En el Reino Unido, los ingresos por derechos de actuación van al PRS, que paga 50% al compositor y 50% al editor. Los ingresos por derechos de reproducción van al editor (a veces vía MCPS) el cual paga una cuota al compositor de acuerdo al su contrato de edición.
PROBLEMAS
Las entrevistas conducidas como parte de este informe, junto con nuestra encuesta de la comunidad de gestión del artista, identificó siete problemas que la industria musical debe discutir urgentemente.
1. La división de ingresos de streaming
¿La división de ingresos de streaming entre cada parte interesada es justa? Esto incluye la división entre los servicios de streaming y la comunidad de la música, entre los derechos de grabación y de la canción, entre los derechos de reproducción y de actuación, y entre el artista y el sello.
2. Remuneración equitativa del interprete y disponibilidad
Los derechos de actuación en muchos países dicen que todos los artistas merecen remuneración equitativa cuando sus ‘derechos de actuación’ están siendo explotados. Sin embargo, como ya antes mencionado, la mayoría de los sellos dicen que los servicios digitales explotan un derecho especifico y separado llamado el ‘derecho de disponibilidad’, y que la remuneración equitativa no entra en estos ingresos. No todos los artistas están de acuerdo, mientras algunos actos con contratos anteriores a 1990 dicen que los sellos no pueden explotar este derecho de cualquier manera sin su aprobación.
3. Acuerdos digitales y confidencialidad
Los sellos, editores y OACs han creado plantillas para los acuerdos con los servicios de streaming, con arreglos de ingresos, garantías mínimas, adelantos, equidad y otras comisiones ilegales. Los artistas y managers usualmente son dejados en la obscuridad en estos arreglos; raramente son consultados en los méritos de cada componente del acuerdo; y muchos sienten que los artistas están siendo injustamente excluidos de las ganancias generadas por los adelantos, equidad y otros beneficios ofrecidos a los propietarios corporativos de los derechos.
4. Puertos seguros y servicios de exclusión voluntaria
Mientras algunos servicios de streaming solo llevan el contenido provisto por sus socios de sellos, otros – incluyendo YouTube y SoundCloud – permiten a los usuarios subir contenido. Los propietarios de los derechos pueden luego pedir que el contenido sea removido, o permitir que se mantenga por razones promocionales, o en algunos casos – como en YouTube – elegir monetizarlo en la plataforma. Estos servicios dependen en los llamados ‘puertos seguros’ en Estados Unidos y leyes europeas para evadir la responsabilidad de la violación de los derechos de autor mientras se hospeda material sin licencia que los usuarios han subido. Algunos se preguntan si los puertos seguros fueron diseñados para este propósito, y si la existencia de ‘excluir’ los servicios de streaming de este tipo está distorsionando el mercado musical digital en general.
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5. Datos
La industria de la música ahora necesita procesar cantidades de datos sin precedentes, mientras los ingresos y las regalías incrementan basados en el consumo en vez de ventas. La falta de datos de propiedades de derechos también baja la eficiencia, especialmente en el lado de los editores. Casi ciertamente hay soluciones de ‘grandes datos’ a estos problemas, el desafío es ¿quién puede liderar esta actividad, y podrán los sellos, editores y OACs compartir datos de propiedades de derechos cruciales que se encuentran en su control?
6. Concesión de licencias colectivas
Los sellos licencian la mayoría de los servicios digitales directamente, mientras que los editores usan sus OACs la mayoría de las veces. Por varias razones, los artistas y compositores prefieren que el dinero vaya a través del OAC en vez de a sus sellos y editores, aunque hay una discusión acerca de que este no es siempre la forma más eficiente de procesar los ingresos y los datos. De cualquier forma, los artistas y compositores se sientes excluidos del debate sobre los pros y contras de la concesión de licencias colectivas.
7. Adaptándose a los nuevos modelos de negocios
Uno de los desafíos más grandes para todos en la comunidad de la música es simplemente adaptarse a una nueva manera de hacer negocios, en donde importa más las reproducciones prolongadas que las ventas en la primera semana, y en donde los álbumes y pistas exitosas entregarán ganancias en un periodo de tiempo más largo, en vez de a través de un pico a corto plazo. Adaptándose a esta nueva forma de hacer negocios es probablemente sólo un hecho de vida, aunque algunas partes interesadas tal vez se defiendan más que otras de cualquier efecto negativo a corto plazo.
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PREGUNTAS
Como dijimos, el objetivo de este reporte es informar e iniciar debate. Desde los siete problemas que hemos identificado, aquí poseemos 15 preguntas para la industria musical más amplia para discutir, considerar y responder.
1. ¿Cómo debería dividirse los ingresos digitales entre la industria digital y las plataformas digitales en sí?
2. De los 70-75% de ingresos de streaming pagados a la industria, ¿Cómo estos pagos deben ser divididos entre los dos derechos de autor, es decir, los derechos de la grabación y los de la canción?
3. Las descargas y streams explotan los controles de reproducción y comunicación – es decir los derechos de reproducción y actuación. ¿Cómo se puede asignar los ingresos entre los dos elementos de cada derecho?
4. Cuando un sello discográfico es dueño del derecho en una grabación de sonido pero paga una regalía al artista que la toca bajo los términos de su contrato de grabación, ¿qué regalía le debería pagar el sello por descargas y streams comparados con los CDs?
5. ¿Qué tipo de servicios digitales explotan el derecho de actuación convencional y qué tipo explotan el específico ‘derecho de disponibilidad’, y debería ser la ley de derechos de autor más específica con este punto?
6. ¿La remuneración equitativa del intérprete debería ser aplicada a todos los servicios de streaming, incluyendo esos explotando el derecho de disponibilidad?
7. ¿Los sellos discográficos necesitarían una renuncia de disponibilidad de todos los artistas antes de explotar sus grabaciones digitalmente?
8. ¿Deberían las compañías discográficas y editores de música demandar equidad de los startups de música? Y, si es así, ¿deberían compartir las ganancias con cada venta subsiguiente con sus artistas y compositores, y en qué términos?
9. ¿Deberían las compañías discográficas y editores de música demandar largos adelantos de los nuevos servicios digitales, y si es así, deberían ellos compartir cualquier ‘rotura’ (adelantos sin asignación) con sus artistas y compositores, y si es así, en qué términos?
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10. ¿Deberían las compañías discográficas y sellos de música demandar otras comisiones de los nuevos servicios digitales, y sí es así, deberían compartir los beneficios con sus artistas, y sí es así, en qué términos?
11. ¿Puede ser correcto que los beneficiaros de los derechos de autor no sean permitidos saber cómo sus canciones y grabaciones están siendo monetizados, y debería un nuevo derecho de actuación asegurar que la información sea disponible para artistas, compositores y sus representantes?
12. ¿Los puertos libres en leyes Europeas y Americanas deben ser revisados para que compañías como YouTube y SoundCloud no puedan beneficiarse de ellos, sin importar que tan buenos o no sean sus sistemas para quitar contenido que viole los derechos de autor?
13. ¿Cómo hace la industria de los derechos musicales para enfrentar el desafío de procesar el uso de datos y pagos de regalías de los servicios de streaming, cuáles demandas de datos los artistas y compositores deben estar haciendo a sus sellos, editores y OACs, y se requerirá base de datos central de propiedad de derechos de autor a la larga?
14. ¿Los servicios de streaming se licencian mejor directamente o a través de Organizaciones de Administración colectiva; si es directamente cuál es la mejor solución cuando las sociedades controlen los elementos de los derechos de autor; y realmente se les dice a los artistas y compositores las soluciones que se han adoptado?
15. ¿Acaso el mayor desafío para la industria musical es simplemente adaptarse a un nuevo modelo de negocio el cual su paga se base en consumo en vez de ventas, y a través de un periodo más largo de tiempo; y qué pueden los artistas y compositores para adaptarse mejor?
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