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English to Spanish: Aiding Working, Military Families General field: Other Detailed field: Government / Politics
Source text - English 728 words
Aiding Working, Military Families
By Michelle Obama
U.S. News & World Report, October 27, 2008.
A few weeks ago at the Democratic National Convention in Denver, I shared with the nation some of the many reasons why I believe my husband will be an extraordinary president. It was the biggest speech I'd ever given. When I was finished, I headed backstage with my daughters. They turned to me, breathless with excitement.
"Mom," Malia, our 10-year-old, said. "We have something important to tell you. We need to have a sleepover!"
That snapped me out of speech mode, with the bright lights and applause, and back into the role I love: Mom. The next night, 15 giggling girls--my daughters, the Biden granddaughters, and friends--took over our hotel room.
If Barack is elected president, I would be honored to be first lady. I would work daily on the issues closest to my heart: helping working women and families, particularly military families. But as my girls reminded me in Denver, even as first lady, my No. 1 job would still be Mom. At 7 and 10, our daughters are young. If we move to Washington, my first priority will be to ensure they stay grounded and healthy, with normal childhoods--including homework, chores, dance, and soccer.
Our girls are the center of Barack's and my world. They're the reason he is running for president--to make the world a better place for them and for all children. For us, and for millions of Americans, that's what this election is about--making sure that America remains a country where everyone can fulfill their God-given potential.
Barack and I have traveled to every corner of the country, talking with people about their lives and dreams. Their stories have touched our hearts and strengthened our resolve. They've made us more certain than ever that, despite any differences we may have, there is so much that unites us as Americans. But times are tough. Parents are working harder than ever to raise their kids, pay bills, help out their parents, and keep up with the rising cost of living. Caring for their families is their greatest joy--but it's harder to make ends meet.
We've talked to mothers whose salaries can't cover the cost of groceries--but if they take a second job, they can't afford the additional cost of child care. More than 22 million working women don't have paid sick days. Millions of women are doing the same jobs as men--but they're earning less.
It's even harder for military spouses. Their husbands and wives are away serving our nation for months at a time. So they have to be Mom and Dad. They're working, checking in on their in-laws, helping with homework, and doling out discipline--and every night, they're praying with all their hearts for their loved ones' safe return. These families aren't asking the government to fix their problems. They're asking for it to understand what's happening to their families and to find real ways to help.
American stories. As first lady, I'd continue these conversations with working women and military spouses, and I'd take their stories back to Washington to make sure that the people who run our country know how their policies touch their constituents' lives.
The struggles of America's families aren't new to Barack. He was raised by a single mom who put herself through school and built a career that she loved while still finding time to read to him each morning. So, he knows how heroic America's parents can be. That's why he is committed to restoring the middle class, cutting taxes for 95 percent of all working Americans, establishing pay equity for women, and expanding family leave. He also knows that when our military goes to war, their families go with them. He's a strong advocate for predictable deployments and for better healthcare--including mental health care--for returning servicemen and women
These issues are my passions. Win or lose on November 4, I'll keep working to find solutions that make a real difference in people's lives. If Barack has the chance to serve as president, we will fill our home with talk of how to better serve our nation's families.
And occasionally, when our daughters insist, we'll host sleepovers, too.
(c) 2008 U.S. News & World Report. Distributed by Tribune Media Services.
Translation - Spanish
US NEWS & WORLD REPORT
October 27, 2008
AYUDANDO A LA CLASE TRABAJADORAS Y A LAS FAMILIAS DE MILITARES.
BY MICHELLE OBAMA
Hace algunas semanas en la Convención Nacional Demócrata en Denver, compartí con la nación algunas de las razones por las cuales considero que mi esposo será un presidente extraordinario. Este ha sido el discurso más grande que he dado. Cuando termine, me dirigí a la parte trasera del escenario con mis hijas. Ellas voltearon hacia mi sin aliento por la emoción.
“Mami”, me dijo Malia nuestra hija de 10 anos. Tenemos algo importante que decirte. Tenemos que tener invitadas a dormir!”
Eso me saco de golpe de mi modo de discurso, con las luces brillantes y los aplausos, y me llevo de nuevo al papel que tanto amo: de Madre. La siguiente noche 15 niñas risueñas -- mis hijas, las nietas de los Biden y algunas amigas tomaron nuestro cuarto de hotel.
Si Barack es elegido presidente, estaré honrada de ser la primera dama. Trabajare de cerca en los temas más cercanos a mi corazón: ayudar a las mujeres trabajadoras y a las familias, particularmente a las familias de los militares. Pero así como mis hijas me recordaron en Denver, aun siendo la primera dama, mi trabajo No. 1 sigue siendo la de ser mama. Con edades de 7 y 10 anos, nuestras hijas son muy jóvenes. Si nos mudamos a Washington mi prioridad será el asegura su salud y que mantengan los pies sobre la tierra, con infancias normales – que incluyen tareas del colegio, coro, danza y soccer.
Nuestras niñas son el centro del mundo de Barack y el mío. Ellas son la razón por la cual Barack está participando en estas elecciones para presidente – para hacer del mundo un lugar mejor para ellas y para todos los niños del mundo. Para nosotros, y para millones de americanos, esto es lo que significan estas elecciones – asegurarnos de que América siga siendo un país en el que todos puedan desarrollar el potencial que Dios les ha dado.
Barack y yo hemos viajado a cada rincón del país, hemos hablado con la gente sobre sus sueños y sus vidas. Sus historias han tocado nuestros corazones y han fortalecido nuestra resolución. Nos han hecho más ciertos que antes que, a pesar de cualquier diferencia que podamos tener, hay mucho más que nos une como Americanos. Pero los tiempos son difíciles. Los padres trabajan más duro que antes para criar a sus hijos, pagar sus cuentas, ayudar a sus padres y mantenerse con la continua subida del costo de la vida. Cuidar de sus familias es su mayor felicidad – pero es difícil que ambos intereses coincidan.
Hemos hablado con madres cuyos salarios no cubren el costo de sus comestibles – pero si toman un Segundo empelo, no pueden afrontar el costo extra para el cuidado de sus hijos. Más de 22 millones de mujeres que trabajan no reciben paga el día que no trabajan por estar enfermas. Millones de mujeres realizan el mismo trabajo que los hombres – ellas reciben menos paga.
Es aun más difícil para las parejas de los militares. En cierto momento sus esposas y esposos están lejos sirviendo a nuestra nación. Así que tienen que ser padre y madre de sus hijos. Ellos están trabajando, pendientes de sus parientes, ayudando con la tarea y disciplinando a los hijos – y cada noche rezan con el corazón para que sus seres queridos regresen sanos y salvos a casa. Estas familias no le están pidiendo al gobierno que arregle sus problemas, únicamente piden que entiendan lo que les sucede a sus familias y a encontrar verdaderas maneras para ayudarlos.
Historias Americanas. Como Primera Dama, continuaría teniendo estas conversaciones con las mujeres trabajadoras y las esposas de los militares, y llevaría estas historias a Washington para asegurarme que las personas que dirigen nuestro país conozcan la manera en la que sus políticas tocan la vida de su electorado.
La lucha de las familias Americanas no es nueva para Barack. El fue criado por una madre soltera que logro ponerse en la escuela y conseguir una carrera la cual amaba, mientras seguía consiguiendo el tiempo para leerle a él cada mañana. Así que, él sabe cuán heroicos pueden ser los padres Americanos. Es por eso que el se ha comprometido a restaurar a la clase media, reduciendo los impuestos al 95 por ciento de todos los Americanos que trabajen, estableciendo equidad en los pagos de las mujeres y extendiéndolo a la ausencia por asuntos familiares. El también sabe que cuando nuestros militares van a la Guerra, sus familias van con ellos. El es un fuerte defensor del desplazamiento predecible y de un mejor sistema de salud – incluyendo cuidados de salud mental para los hombres y mujeres que regresan
haber prestado servicio.
Estos temas son mi pasión. Gane o pierda el 4 de Noviembre, seguiré trabajando para encontrar soluciones que hagan una diferencia real en la vida de las personas. Si Barack tiene la oportunidad de servir como presidente, llenaremos nuestro hogar con pláticas de como servir mejor a las familias de nuestra nación.
Y ocasionalmente, cuando nuestras hijas insistan, recibiremos invitados a dormir también.