Off topic: Radiografía del desarraigo: qué extrañan los (argentinos) que viven en el exterior Thread poster: virginia ferreira
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Hola a todos!
Algunos ya lo saben, a los que no, soy una argentina que vive en Europa. Esta mañana, estaba leyendo un diario argentino por internet y encontré este artículo que me tocó un poco- o "me dio cosita"....Me gustaría saber qué piensan ustedes, los que dejaron su país (no importa cual)y ahora se encuentran en un nuevo suelo, en una nueva cultura, con otro aroma y sabor.
Un beso para todos desde Luxemburgo!
Virgin... See more Hola a todos!
Algunos ya lo saben, a los que no, soy una argentina que vive en Europa. Esta mañana, estaba leyendo un diario argentino por internet y encontré este artículo que me tocó un poco- o "me dio cosita"....Me gustaría saber qué piensan ustedes, los que dejaron su país (no importa cual)y ahora se encuentran en un nuevo suelo, en una nueva cultura, con otro aroma y sabor.
Un beso para todos desde Luxemburgo!
Virginia Ferreira
www.virginiatrans.uk.tt
Radiografía del desarraigo: qué extrañan los argentinos que viven en el exterior
Leen diarios y oyen radios argentinas por Internet, y buscan conectarse con otros compatriotas que estén afuera para compartir costumbres. Entre enero de 2000 y abril de 2002 se fueron del país 260.000 personas.
Lo que necesito es un día mío en la Argentina: levantarme, ir a mi negocio, tener dos horas para almorzar con mis hijos, que alguien pase a tomar un café e ir al cine una vez por semana. No es tanto, ¿no?". Y no, no es tanto, pero no es posible: hace ocho meses que Gabriela Szalcowicz vive en Delray, Miami. Poco tiempo para ser una más, mucho para extrañar —para saberse extraña—, suficiente para aprender dónde hay tapas para empanada, buena carne o llaveritos de Boca.
Siglo XXI: las emigraciones son lo que han sido siempre —desarraigo, incomunicación, distancia— pero también son otra cosa. Internet mediante, los argentinos que dejaron el país escuchan las radios que escuchaban en casa, leen los diarios de siempre y se dan citas en fiestas albicelestes que fundan, por un rato, unos metros de Argentina en Valencia, en Barcelona, en Roma.
Son muchos: la Cancillería calcula que hoy viven fuera del país unos 600.000 argentinos. Citando datos estimativos de Migraciones, Diego Melamed, autor del libro Irse, asegura que entre enero de 2000 y abril de 2002 se fueron del país 260.000 personas, la mayoría —en ese orden— a España, Italia y Estados Unidos.
Donde hay más compatriotas, claro, es más fácil: "¡Acá son todos argentinos!", se ríe Magdalena Serna, una artista plástica que hace pintura mural y mosaico en Barcelona.
"El 40 por ciento de los mozos, el dueño del restaurancito donde almuerzo... si echás una mirada a las Ramblas, la mitad de las remeras son de Boca o blancas y celestes. Y no exagero. Hasta hay un bar que se llama BarCHElona. Somos como un gueto: si estás al lado de uno no podés dejar de hablarle o decir algo para que se dé cuenta de que vos también sos... argento".
Si no se los encuentra en las Ramblas, Magdalena se choca con otros argentinos en las fiestas. No es difícil conocer la cita: en http://fiestasargentinas.com aparecen. Ahí está, en estos días, la promesa: "A partir de junio, todos los viernes, tu fiesta". Que vendría a ser algo así: "Cumbias, cuartetos, latinos, pop, rock, alfajores, galletitas, golosinas, empanadas, sándwichs de milanesa, buena onda". Milanesas y rock, por si alguien dudaba que la comida es cultura. La promoción está en castellano, claro. El mapa que explica cómo llegar, en cambio, está en catalán.
Distinto es el caso de J.S.V, quien en un foro de argentinos en el extranjero, en Internet, deja el llamado: "Quisiera saber si hay alguien en Escocia o yo soy el único".
"En mi equipo escucho Soda Stéreo, Fito Páez, Charly", dice Griselda Leibold, que se casó con un alemán y se fue a vivir a Nürenberg. "Un alemán encontró un disco de Rodrigo en una tienda y me lo compró. Lo escuché por primera vez aquí... y los alemanes, encantados por el ritmo".
En la casa de ahora hay cosas que no hubiera puesto en la que dejó: "Colgué una cintita con los colores argentinos, minúscula casi, que me envió mi hermano. Y eso sí, en el mundial, camisetas de River Plate, Bandera argentina ¡y a sentarse frente al televisor a hacer el aguante!, cuenta Griselda, que es la única argentina de la casa.
En Ashkelon, Israel, Julia Gordon mira Celeste siempre Celeste, mira 099 Central, mira El sodero de mi vida, Los buscas, mira cuanto programa haya "donde hablen en castellano, no en español". ¿Cómo? "Que hablen como en la Argentina y de temas de la Argentina", quiere Julia, 85 años en la Reina del Plata, 6 meses en Israel. Ese castellano argentino se lo lleva, además de las novelas, un casette de Bocacci a tango limpio, que su nieta le graba de la radio y le manda por correo cada tanto.
En Israel hay muchos argentinos: sólo el año pasado emigraron unos 6.000. Entre ellos Ariel García, oriundo de Santa Rosa de Calamuchita y "cuervo de corazón". Hace unos días, Ariel recibió un mensaje por correo electrónico: "Hola cuervos en Israel". Lo invitaban a un asado de la "Peña Israelí Sanlorencista Beto Acosta".
Las premisas eran llevar cubiertos y platos, cada familia su ensalada, de las bebidas se encarga Ricky, lo de la carne está arreglado y ¡no olvidarse la camiseta!.
Desde hace 8 meses Ariel vive con Laura, su mujer, muy lejos de las sierras, en Ein Hashloshá, un kibutz formado en un 90 por ciento por argentinos. "Acá es fácil —dice Laura—, en el mercadito interno del kibutz conseguís alfajores Terrabusi, dulce de leche Gándara, Cabshas, dulce de batata y de membrillo, de todo".
Juntarse, juntarse: hay muchos motivos, hay causas en común, hay un pasado y quizás hay un futuro juntos; hay un presente en el que todos se saben mirando al sur. El último 25 de Mayo, 170 argentinos que viven en Irlanda hicieron un almuerzo. Para verse, claro, pero también para reunir fondos para Comedores Infantiles en Argentina. "Muchos de nosotros estamos esperando ansiosos una nueva fiesta para nuestro Día de la Independencia. Escuchamos ideas y colaboraciones para que el 9 de julio también lo pintemos de celeste y blanco", dice Mayra Pardo en un mail a otro argentinos, en Dublín.
Rubens Miseta hace, por deporte, la página web Miseta.com, que tiene su listado de negocios y profesionales argentinos en California, de diarios y revistas y hasta de música: ahí puso a Soledad Pastorutti, a Lalo de los Santos, a Sandro, a Mercedes Sosa y hasta a Los Iracundos. "Te puedo asegurar que todos estaríamos de vuelta mañana, pero es difícil, vos sabés cuál es la realidad", dice a Clarín.
En Pedralba, Valencia, el domingo 17 se reunieron devotos de la Virgen de Luján para honrar a su patrona, que luce colores patrios.
Los colores patrios. "Colgamos la Bandera argentina en casa. Para no olvidar", escribe Maximiliano Gil desde Londres.
Los sonidos. "Encontré un lugar con radios argentinas en Internet. En las elecciones seguí todo el escrutinio paso a paso, lo único raro era cuando decían la hora", dice Paula Tellez, en Washington.
Las reflexiones. "Empiezo a respetar a la 'bobe' (la abuela), que había venido de Polonia y hablaba mal", dice Gabriela Szalcowicz, en Miami. "Cada vez que mis hijos me hablan en inglés les doy un coscorrón en la cabeza".
En general no se arrepienten, en general quisieran volver a este país si fuera un poco otro país, algunos se esfuerzan en amar el suelo nuevo, algunos en no mezclarse.
Cómo se sienten, lo resume Alejandra Duvrovnik en París: "Aquí uno empieza a extrañar hasta lo que allá no le gustaba tanto".
Fuente: www.clarin.com ▲ Collapse
| | | | | Volverán para hacerla mejor | Jun 10, 2003 |
Muchos de ustedes volverán poco a poco y le traerán a su Madre las riquezas que hayan arrancado a las vidas del destierro, con la sabiduría de las horas muertas y las cicatrices de las humillaciones, pero también con los conocimientos esenciales para reconstruirla y el recuerdo cálido de los amigos y seres queridos que no estaban destinados a conocer y que, sin embargo, hallaron cuesta abajo y cuesta arriba de la gran corriente, rescatándose mutuamente allí donde creían estar perdidos. L... See more Muchos de ustedes volverán poco a poco y le traerán a su Madre las riquezas que hayan arrancado a las vidas del destierro, con la sabiduría de las horas muertas y las cicatrices de las humillaciones, pero también con los conocimientos esenciales para reconstruirla y el recuerdo cálido de los amigos y seres queridos que no estaban destinados a conocer y que, sin embargo, hallaron cuesta abajo y cuesta arriba de la gran corriente, rescatándose mutuamente allí donde creían estar perdidos. La patria llora y se desangra con la partida de sus hijos, pero conserva en sí misma, invencible, el sueño y la verdad de exultar y regenerarse con su retorno. ▲ Collapse
| | | | two2tango 
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| Reflexiones sobre la emigración | Jun 10, 2003 |
Hermosas palabras, amigo Valentín.
La emigración implica desarraigo y representa un enorme esfuerzo que merece el mayor de los respetos.
A pesar de ser combatida en el país de destino (por quienes la ven como competencia agregada), la sociedad receptora se enriquece con la inmigración ya que, independientemente de su nivel de estudios, la gente que emigra tiene una cuota de coraje y de dinamismo positiva para cualquier sociedad capaz de integrarla.
Tamb... See more Hermosas palabras, amigo Valentín.
La emigración implica desarraigo y representa un enorme esfuerzo que merece el mayor de los respetos.
A pesar de ser combatida en el país de destino (por quienes la ven como competencia agregada), la sociedad receptora se enriquece con la inmigración ya que, independientemente de su nivel de estudios, la gente que emigra tiene una cuota de coraje y de dinamismo positiva para cualquier sociedad capaz de integrarla.
También es cierto lo que dice Valentín. Emigrados que regresan al hogar se llevan de vuelta la amplitud de miras adquirida en el esfuerzo de adaptación. Traen otros valores y otras visiones, y al difundirlas en su sociedad nativa la enriquecen, cerrando el circuito del intercambio cultural.
Y por último, de la inmigración y la mezcla y el conocimiento nacen vínculos personales y se debilitan las etiquetas, la lamentable tendencia a ponerle un rótulo a una sociedad en pleno, en general para descalificarla: "los argentinos son..." "los italianos son todos unos...". Cuando interactuamos cara a cara con un extranjero, a nivel humano e individual (el único que realmente importa, lo demás son abstracciones), entonces se hace evidente la falsía de las etiquetas.
Mis respetos a quienes se han atrevido a cambiar de horizontes y son capaces de mirar atrás con afecto.
Enrique ▲ Collapse
| | | | Aurora Humarán (X)
Argentina
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| 260.000 personas... | Jun 10, 2003 |
Tengo gente querida que optó por irse de la Argentina. A hacer un Master, porque se casaron con extranjeros y DECIDIERON irse. A esos los despedimos en Ezeiza con lágrimas pero felices, en el fondo de nuestros corazones.
Tengo otros amigos. Amigos que tuvieron que irse porque se les acabaron las esperanzas, las fuerzas, los sueños, las posibilidades. A esas ausencias todavía no pude metabolizarlas, lo confieso.
Rescato que les quedó CORAJE para volver... See more Tengo gente querida que optó por irse de la Argentina. A hacer un Master, porque se casaron con extranjeros y DECIDIERON irse. A esos los despedimos en Ezeiza con lágrimas pero felices, en el fondo de nuestros corazones.
Tengo otros amigos. Amigos que tuvieron que irse porque se les acabaron las esperanzas, las fuerzas, los sueños, las posibilidades. A esas ausencias todavía no pude metabolizarlas, lo confieso.
Rescato que les quedó CORAJE para volver a empezar. Y cuánto....
Claro que ahí están los olores, los sabores, los códigos que compartimos los argentinos, un ¡¡¡DALE BOCA!!!, un sabor a alfajores, un ¿qué hashé, tritrí?.
El sueño de tantos: que los que quieran volver, puedan volver pronto.
Aurora ▲ Collapse
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Vivir afuera... ¡Uf! Lo mío es una mezcla realmente, pero se acerca mucho más a la opción, como dice Au. Igual, cuesta, pero uno tiene una perspectiva diferente de aquel que se va para "empezar de cero", es diferente. Aunque es inevitable ponerse una camiseta de Argentina para ver el Mundial, ir a comprar dulce de leche a la otra punta de la ciudad (aunque en Argentina nunca lo comías), alegrarse cuando uno ve mermelada argentina en un super y, soy sincera, tener una mezcla de sensac... See more Vivir afuera... ¡Uf! Lo mío es una mezcla realmente, pero se acerca mucho más a la opción, como dice Au. Igual, cuesta, pero uno tiene una perspectiva diferente de aquel que se va para "empezar de cero", es diferente. Aunque es inevitable ponerse una camiseta de Argentina para ver el Mundial, ir a comprar dulce de leche a la otra punta de la ciudad (aunque en Argentina nunca lo comías), alegrarse cuando uno ve mermelada argentina en un super y, soy sincera, tener una mezcla de sensaciones raras cuando escuchás hablar a otro argentino...
Y el sueño de volver siempre está...
Saludos.
ALE ▲ Collapse
| | | | Gabriela Tenenbaum (X)
Uruguay
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Y yo que me sentía "rara" por haber elegido Holanda....
¿Qué estás haciendo en Luxemburgo? Además de vivir en uno de los lugares más hermosos del planeta, claro...
Estoy a punto de comenzar a extrañar, me voy en pocos días. Con el tiempo, ya les contaré. Por ahora, sigo tomando mate.
Saludos
Gaby.
| | | | | Hola Virginia | Jun 10, 2003 |
Da cosita, como dices, y da qué pensar.
Es un tema sobre el que he reflexionado muchísimo, y durante muchos años me quedé pegada en él. Me leía todos los libros que trataban el tema, de Benedetti, Donoso, Skármeta, y otros. Al estudiar textos con mis alumnos escogía textos sobre esos temas y los que trataban de dictaduras. Y ahora, años después, me digo que la terapia me salió barata.
Tu artículo me trajo muchos recuerdos. Mi exilio no fue en la época de Internet,... See more Da cosita, como dices, y da qué pensar.
Es un tema sobre el que he reflexionado muchísimo, y durante muchos años me quedé pegada en él. Me leía todos los libros que trataban el tema, de Benedetti, Donoso, Skármeta, y otros. Al estudiar textos con mis alumnos escogía textos sobre esos temas y los que trataban de dictaduras. Y ahora, años después, me digo que la terapia me salió barata.
Tu artículo me trajo muchos recuerdos. Mi exilio no fue en la época de Internet, no me imagino cómo es el de ahora. Quizás un poquito más llevadero, pero la distancia es la distancia.
Lo raro es que yo me fui de mi país a los diez años y que teóricamente a esa edad reunía las condiciones para olvidar, no añorar, adaptarme... Y sí me adapté, pero también guardé mis recuerdos en un baúl y cada cierto tiempo los contemplaba para mantenerlos vivos. No añoraba gran cosa, lo que le encargué a mi papá la primera vez que volvió a Chile, ocho años después, fue mermelada de mora, de esa hecha en casa que comprábamos cuando íbamos de visita donde la tía Carmen. Me trajo mermelada de mora de esa que venden en frascos en el supermercado. Ahí murió uno de mis recuerdos.
Sin embargo una espinita quedó ahí, y fue al venirme a vivir a Chile cuando por fin me la pude sacar. Ahora me siento dispuesta a volver a irme a cualquier lado porque sé dónde están mis raíces.
Lo de agruparse, de parecer gueto (no encuentro esta palabra en el diccionario, me pregunto si es con una o dos t) lo vi muy de cerca. Vivíamos en Argelia. En Argel había una gran colonia latinoamericana y muchos chilenos. La mayoría médicos y con alojamientos del hospital, por lo que vivían en la misma urbanización. Pero en Orán, donde vivía yo, éramos cinco familias de sudamericanos. No siempre las mismas, pero siempre entre tres y ocho. En esos casos uno no se pregunta si hubiéramos sido amigos en nuestro país. O si nos hubiéramos encontrado algún día, de ser en otro lado. Todas las diferencias, sociales, económicas, de intereses, de edad, se borraban. Éramos sudamericanos, hermanos, como dice la canción. Y en esa época las dictaduras habían echado afuera a uruguayos, argentinos y chilenos. Algunos habían pasado por los tres países antes de llegar a Argelia. Ahí estaban los demás para cualquier necesidad, desde cuidar a los niños a prestar el auto o plata, o sea sacar de apuro. Para los asados o ir a la playa, también, por supuesto.
Cuando me fui a estudiar a Francia, llegué a Reims donde conocía a unas cuantas personas. Al ir a registrarme a la policía de extranjería les pregunté si había otros chilenos en la ciudad (me acordé de esto al ver al que buscaba a alguien en Escocia). Había sólo un venezolano. Por supuesto que nos hicimos amigos.
Estudiaba en una escuela de comercio y me fue mal. Tuve una depresión (pero de esto me di cuenta después, cuando salí de ella). Y ¿saben cuál fue el remedio?
Ponerme a estudiar español. Fue el no hablar mi lengua lo que me deprimió. Y fue así cómo me di cuenta de lo importante que era para mí. ▲ Collapse
| | | | mgonzalez (X)
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| + reflexiones (con su permiso, Sr moderador) | Jun 10, 2003 |
Aparte de suscribir las reflexiones de Enrique 2²Tango, me gustaría añadir que regresar es, en la mayoría de los casos, más difícil que marcharse del lugar de origen, por lo que veo en Madrid, centro de inmigración en España, destino primero del éxodo rural español en décadas pasadas, y hoy de la inmigración procedente del África noroccidental y de Sudamérica, que ya empiezan a elegir España como destino final y no sólo como trampolín para el ‘salto a Europa’. Creo que uno ... See more Aparte de suscribir las reflexiones de Enrique 2²Tango, me gustaría añadir que regresar es, en la mayoría de los casos, más difícil que marcharse del lugar de origen, por lo que veo en Madrid, centro de inmigración en España, destino primero del éxodo rural español en décadas pasadas, y hoy de la inmigración procedente del África noroccidental y de Sudamérica, que ya empiezan a elegir España como destino final y no sólo como trampolín para el ‘salto a Europa’. Creo que uno es en realidad de donde echa raíces tanto o más que de su lugar de orígen, y como tal debe considerarse a sí mismo, independientemente de su nacionalidad, mero ‘accidente’ jurídico. Conozco a muchísimos inmigrantes, todos hablan de regresar, pero pocos tienen la oportunidad de hacerlo. Dicho esto, me parece muy lamentable que uno haya de hacer las américas, las europas, o lo que sea, para ganarse el sustento.
En otro orden de cosas, y puesto que de emigrar estamos hablando, ya hay empresas en internet que le gestionan a uno la inmigración legal a España: http://www.conpapeles.com/, por si a alguien le sirve de algo. Un cordial saludo a todos. MG. ▲ Collapse
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José Luis Villanueva-Senchuk (X)
Argentina
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| Largo pero sentido... Sepan disculparme ;-) | Jun 10, 2003 |
Hola,
Yo no te puedo hablar sobre lo que siente un argentino fuera de su terruño pero si te puedo comentar sobre mi experiencia... ¿Me permites? Supongo que sí pues a eso viniste...a escuchar y tomar un chocolate con crema y amareto para luego comentar con los compañeros de mesa y tertulia.
Antes de empezar te cuento que existe el “famoso” duelo migratorio. Yo aprendí sobre él mientras interpretaba para un psicólogo en Barcelona. Las cosas que tiene la vid... See more Hola,
Yo no te puedo hablar sobre lo que siente un argentino fuera de su terruño pero si te puedo comentar sobre mi experiencia... ¿Me permites? Supongo que sí pues a eso viniste...a escuchar y tomar un chocolate con crema y amareto para luego comentar con los compañeros de mesa y tertulia.
Antes de empezar te cuento que existe el “famoso” duelo migratorio. Yo aprendí sobre él mientras interpretaba para un psicólogo en Barcelona. Las cosas que tiene la vida, ¿verdad? Un trotamundos como yo, que había experimentado el duelo hasta cierto punto, no sabía que existía como una categoría importante dentro de la psicología y sociología de los migrantes. En fin...
Ya que estamos con la teoría quiero compartir un par de cosas que aprendí desde el punto de vista teórico. La migración y la salud mental van de la mano. Los inmigrantes pueden verse sumidos en el duelo migratorio y experimentar sentimientos de soledad, perder su proyecto migratorio, sufrir culpa y además vivir bajo un estrés permanente.
El duelo migratorio es el que se produce al separarte de tu tierra de lo que es afectivamente significativo: familia, religión, costumbres, amigos, lengua, paisajes, olores, comidas, dinamismo laboral, sentido de pertenencia a un grupo, nivel económico, etc. En mi caso, creo que lo experimenté de pequeño y a medias. Mis mudanzas y estadías en países diferentes tuvieron siempre un anclaje: tuve a la familia hasta los 18 y luego a amigos y puntos tangenciales que me ataban a mi realidad y esencia.
Sobre puntos tangenciales materiales... Cuando trabajé en mudanzas (removals & relocations) me enseñaron a educar al cliente. Te enseñan a decirle que además del contenedor con sus enseres, con su casa, trate de llevar algo que lo ate a su entorno y realidad de hogar mientras está en el hotel o departamento provisional en el nuevo lugar de destino. Para mí fue relativamente fácil entenderlo porque al llegar a Ecuador, me tocó vivir en un hotel más de 4 meses mientras los dos contenedores que tenían nuestra ‘casa’ llegaban y pasaban por aduana. No sabes lo bien que me hizo, mientras viví en el hotel, tener un par de coches de juguete (miniatura) que tenía encima de la repisa en Sevilla, o lo bien que nos hizo a todos tener un par de detalles que mi madre llevó y no dejo que metiesen en el contenedor. Los hijos de expatriados que crecieron con 1x40’ a cuestas, seguro me entienden.
Durante 18 años estuve con la familia aunque en diferentes países: 2 en Colombia, 10 en España, 15 y pico en Ecuador. Luego vinieron los cambios: USA, Guayaquil, Quito, Guayaquil, Barcelona y ahora Buenos Aires.
La soledad si la he experimentado no ha sido en gran medida. Quizá porque las culturas a las que iba, no eran tan diferentes y además porque siempre tenía conocidos en el destino. Sino los tenía los ‘hacía’ o reencontraba, como dice mi amigo y hermano Quique, y por ende la soledad era mínima. Muchas veces no conoces las formas de “ser” y de “estar, otras no conoces el idioma. Pero, siempre hay un pero... Mi seno familiar es multicultural, la mentalidades compartidas y mi exposición (dentro del seno familiar y entorno – colegio internacional, viajes, libros, televisión satelital, etc.) creo ayudaron a que no me sintiese tan mal o solo.
Mi caso no es el del inmigrante que abandona familia empujado por una necesidad para mantener a la familia. Este el caso de muchos que conocí en Barcelona. Gentes amables y buenas, en la amplitud de la palabra, pero con la amargura no desatada del que ‘abandonó’ a sus hijos/familia/amigos para cumplir el sueño y poder despegar. Con la rabia contenida de ser tratado como “sudaca/kosovar/marroquí de mierda” o “indio” o “negro de mierda” o “inmigrante” mientras se rompe la espalda para poder enviar algo a casa y lograr la subsistencia de muchos dentro de la cadena o mientras va en el metro, pagando igual que todos, pero porque se ‘ve diferente’. OJO...el que se endeudó y lo paso mal para llegar a buscar el futuro es muy diferente del delincuente y mafioso en su tierra de origen que quiere hacer lo mismo en el país de acogida – léase robar y pasarlo de “vaca”. (tema para otro poZting )
El choque cultural en mi caso no fue contundente pero algo de esto sí me sucedió en Barcelona. Una cosa era viajar todos los años a España pero otra era vivir en Catalunya después de 12 años de no haber pisado suelo español para vivir en él. Te sientes forastero sin ser extranjero. Es cierto que no te impacta el tamaño de las avenidas, ni el metro, ni los autobuses como le puede impactar a aquellos que vienen de una país pequeño y que nunca han viajado. Es cierto que no te suena raro el golpeteo y tono al hablar en el bar: “¡¡Ponme un café!!!!!!!” en vez del dulce “Hola, me da un café, por favor...” Es cierto que no te extrañan los chorizos y el fuet y las alubias y los albaricoques y plátanos como al que ha comido salami, frijoles y duraznos y bananos toda su vida.
Pero, hay otras cosas que si te impactan – por lo menos a este pechito Me impactó el acelere, el correr continuo, la competencia, la falta de solidaridad, el no conocerse, el pasar a ser el número 46469333, etc. Me impactó no saber dónde estaban las oficinas para hacer los trámites.
Quizá tuve algo de estrés por lo que acabo de decir. Retos y dificultades que a veces te presenta el entorno y que no sabes como encajar. A eso debes sumarle el que, a veces, se pierde el proyecto migratorio. Algunos trazan planes y tiene informaciones y planes o expectativas que son poco realistas y al no verlas cumplidas...se vienen abajo.
Ahora bien, yo extraño cosas de cada lugar en el que he vivido porque soy parte de cada uno de esos lugar. Soy parte del mundo, de los lugares que me acogen y de los que yo acojo en mi alma.
No soy colombiano pero sí lo soy. Sólo nací allí y viví dos años...difícil ser colombiano por haber nacido allí, o quizá no. Mucho tiene que ver tu entorno... como te enseñan a cultivar lo que tienes, lo que te alimenta. No soy español pero sí lo soy. No soy ‘gringo’ pero sí lo soy. No soy argentino pero sí lo soy. No soy europeo pero sí lo soy.
Mis padres, argentina ella (ascendencia lituana y ucraniana) y español él (argentino, asturiano y matices vascos) vivieron en Colombia más de 20 años. En la casa de mis padres siempre se quiso al país que te acogió. Se aceptó lo bueno y se luchó, con el respeto que debe tener un ‘extranjero’ por otro país (el de acogida), por cambiar lo malo [Lo bueno es que como no nos sentimos extranjeros en ningún lugar, sólo forasteros, siempre pudimos luchar mucho y bien ]. Se cultivó el respeto y las costumbres. Todos los miércoles, para darte un ejemplo, en la casa de mis padres se comen fríjoles colombianos con arepas, carne en polvo etc.. Recuerdo que los primeros meses en cada país se destinaban para conocerlo. Conozco más de Ecuador que muchos ecuatorianos que primero conocieron Brickwell Ave. en Miami, durante el boom petrolero, que SU país.
[sin orden]
¿Qué extraño? Los fríjoles, las arepas, el aguardientico, la música (porque la escuché y me la hicieron escuchar para aprender a respetar) ...
No puedo extrañar imágenes ni olores de la tierra que tan sólo me parió pero que no pude ver y oler por mi mismo. Los olores no son fáciles de transmitir ¡¡sniff!!
¿Qué extraño? Los compis de Sevilla del equipo de natación, el olor del Mediterráneo después de la lluvia mientras camino por el Vila Olímpica en Icària, las papas con mojo, el queso majorero, el caminar desde Correos hasta la Barceloneta para almorzar con Rick y con Ale, el ajetreo de un bar con servilletas en el piso mientras me tomo una caña y una de boquerones, el acelere (luego me quejo ), el metro ordenado, la gente respetando la derecha de la escalera mecánica...
¿Qué extraño? A mis padres, a mis hermanos, la fritada, el ceviche, el mote, mis sobrinos, Salinas, Ayangue, la Sierra, Sangolquí y los fines de semana en la cocina de la Hostería mientras ayudaba a mis amigos los dueños...
¿Qué extraño? La nieve, los paseos por el puerto de Marblehead, las hojas otoñales camino a Maine, las langostas, la chimenea...
¿Que tengo? Buenos Aires, un presente para vivirlo, auroras con Aurora, paz, gente que me quiere alrededor, vivencias – buenas y malas, experiencias, crecimiento, amor, amistad, lágrimas, risas, sueños, realidades, amigos, dudas, certezas, conocidos, anécdotas, sonidos, pájaros en mi balcón, olores, sabores, cultura, imágenes en la retina...
¿Sabes lo que tengo? VIDA para vivirla.
Un abrazo y perdón por la perorata...
JL
[Edited at 2003-06-10 18:53] ▲ Collapse
| | | | Valeria Verona
Chile
Local time: 10:58
Member (2003)
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| snif... snif... | Jun 11, 2003 |
Valentín Hernández Lima wrote:
Muchos de ustedes volverán poco a poco y le traerán a su Madre las riquezas que hayan arrancado a las vidas del destierro, con la sabiduría de las horas muertas y las cicatrices de las humillaciones, pero también con los conocimientos esenciales para reconstruirla y el recuerdo cálido de los amigos y seres queridos que no estaban destinados a conocer y que, sin embargo, hallaron cuesta abajo y cuesta arriba de la gran corriente, rescatándose mutuamente allí donde creían estar perdidos. La patria llora y se desangra con la partida de sus hijos, pero conserva en sí misma, invencible, el sueño y la verdad de exultar y regenerarse con su retorno.
Valentín, tus palabras me emocionaron al borde de las lágrimas... no sé por qué.
Soy de esas arraigadas que no optan por irse, ni tienen que hacerlo. Soy de las que sueñan con NO tener que irse... y tu palabras... las sentí muy hondo. Gracias.
Vale
[Edited at 2003-06-11 21:12]
| | | | virginia ferreira
United Kingdom
Local time: 15:58
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TOPIC STARTER | la confesión | Jun 11, 2003 |
Qué hermosas palabras, experiencias y comentarios de todos!!!! mil gracias por compartirlo....
Yo soy una de las que optó por irse y no me arrepiento para nada. Pero tengo que ser honesta, es como que mi ser está dividido en dos. Una parte de mí está en mi Argentina querida, con mi familia, amigos (y mis gatitos), y mi otra parte está aquí en Europa, con mi amor, su familia y mi trabajo. Lloro cada vez que hablo por telefono con mis padres, tengo mi mate todos los días y "el gringo... See more Qué hermosas palabras, experiencias y comentarios de todos!!!! mil gracias por compartirlo....
Yo soy una de las que optó por irse y no me arrepiento para nada. Pero tengo que ser honesta, es como que mi ser está dividido en dos. Una parte de mí está en mi Argentina querida, con mi familia, amigos (y mis gatitos), y mi otra parte está aquí en Europa, con mi amor, su familia y mi trabajo. Lloro cada vez que hablo por telefono con mis padres, tengo mi mate todos los días y "el gringo" (jeje) se encarga de prepararme asaditos bastante seguido.
Pero saben una cosa??? Lo decidí, en 20 días me voy para Argentina!!!! un mes y pico creo....no sé si será mucho o poco tiempo, pero allá voy!! yupi yupi!!!
después les cuento qué tal.
Un gran abrazo a todos y espero que sigan compartiendo sus experiencias.
Virginia ▲ Collapse
| | | | José Luis Villanueva-Senchuk (X)
Argentina
Local time: 11:58
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| El 28 tenemos Powwow... | Jun 11, 2003 |
virginia ferreira wrote:
Qué hermosas palabras, experiencias y comentarios de todos!!!! mil gracias por compartirlo....
Yo soy una de las que optó por irse y no me arrepiento para nada. Pero tengo que ser honesta, es como que mi ser está dividido en dos. Una parte de mí está en mi Argentina querida, con mi familia, amigos (y mis gatitos), y mi otra parte está aquí en Europa, con mi amor, su familia y mi trabajo. Lloro cada vez que hablo por telefono con mis padres, tengo mi mate todos los días y "el gringo" (jeje) se encarga de prepararme asaditos bastante seguido.
Pero saben una cosa??? Lo decidí, en 20 días me voy para Argentina!!!! un mes y pico creo....no sé si será mucho o poco tiempo, pero allá voy!! yupi yupi!!!
después les cuento qué tal.
Un gran abrazo a todos y espero que sigan compartiendo sus experiencias.
Virginia
Si puedes cambiar la fecha y adelantar el viaje...quizá puedas ver, escuchar en vivo y reencontrar a muchas caras y "logos"...
Te esperamos,
JL
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nimrodtran
Spain
Member (2014)
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| Respuesta breve, pero no por ello menos prosaica: | Jun 13, 2003 |
Los sandwiches de miga;
Los alfajores Havanna;
El maíz pisado para el locro;
La soda en sifón.
Conjunta y solidariamente.
| | | | Aurora Humarán (X)
Argentina
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| Otros "..........y.........." argentinos...... | Jun 13, 2003 |
nimrodtran wrote:
Conjunta y solidariamente.
Nu y Eve
Carozo y Narizota
Queso y Membrillo
Grondona y Neustad
Chasman y Chirolita
Pizza y Champán
Pablo y Pachu
Un corte y una quebrada
Gath y Chávez
Me voy a casa...perdón por el delirio.
Es viernes, el resto se puede deducir...
Au
| | | | Elena Sgarbo (X)
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| Nosotros extrañamos mucho.... | Jun 15, 2003 |
...las facturas!!!
...recién hechas, como comíamos (hace 15 y más años) los domingos a la mañana al salir de guardia de 24 hs del Güemes (donde funcionaba la Fundación Favaloro)....
Las facturas eran de "Ceres" y las acompañábamos con café con crema en un bar que se llamaba "Gomías".... sigh!...
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